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La psicología que hay detrás del acoso escolar o Bullying

El término de Bullying es bastante reciente a pesar de que es algo que ha pasado en toda la historia de la humanidad. Hace algunos años no significaba nada para muchas personas, pero en la actualidad se ha vuelto bastante popular.

El acoso escolar, ahora mejor conocido como Bullying, consiste en maltrato psicológico, físico y verbal aplicado entre alumnos de nivel escolar. Hace algunos años el bullying solo podía hacerse en la escuela, pero ahora gracias a las redes sociales se puede hacer de forma digital (ciberbullying).

Para que el Bullying siga, el acosador necesita de la indiferencia, el silencio o la colaboración de otros niños del salón. Este problema es considerado como un tipo extremo de violencia en la escuela.

Durante miles de años el maltrato escolar fue ignorado por los adultos y los profesionales, viéndose como “algo natural”, “adolescencia”, “niños siendo niños”, pero todo cambió en 1982 luego de que tres niños se suicidan por culpa de un abusador. Este caso fue estudiado por el psicólogo Dan Olweus y desde ese entonces el tema empezó a hacerse con el interés de los profesionales y educadores, quienes elaboraron programas de prevención.

El bullying físico o emocional suele ir dirigido a aquellos alumnos que se perciben como menos fuertes o atractivos, ya sea porque si hay una desigualdad física entre el agresor o la víctima o porque el agresor actúa junto con un grupo de estudiantes, algo que le da superioridad física y psicológica.

¿Cuáles son los distintos tipos de Bullying y cómo pueden identificarse?

Si crees que tu hijo es víctima de alguno de los siguientes tipos de Bullying te recomendamos asistir con él a coterfam, un centro de psicología y coaching capaz de ayudarlo a superar los problemas que tiene en el colegio y a seguir con su vida de forma saludable.

Psicológico: Este tipo de bullying forma parte de todas las modalidades del maltrato escolar, y va dirigido directamente a afectar la autoestima de la víctima y hacer que sea una persona más insegura y con más temores.

Físico: El maltrato físico es el componente principal y puede ser causado por puñetazos, patadas, pellizcos, empujones, etc.

Verbal: Se basa en sobrenombres y en insultos, los cuales generalmente son dichos frente a un público, además de que hacen hincapié en las inseguridades o incapacidades de la persona afectada.

Social: Este tipo de abuso está orientado hacia fomentar la exclusión de la víctima dentro de un grupo social, haciendo que otros estudiantes sean partícipes para potenciar el aislamiento.

Ciberbullying: Usar las tecnologías como las redes sociales y las demás plataformas para amenazar, humillar, acosar y molestar a la víctima.

Los tipos de bullying mencionados son las ramas principales del acoso, aunque ahora se han desarrollado clasificaciones más complejas sobre el acoso escolar:

Hostigamiento: Este tiene como característica principal una serie de manifestaciones de insultos, desprecios, faltas de respeto, desconsideración y crueldad hacia la dignidad de la víctima.

Bloqueo Social: Esta acción por parte porte del agresor tiene el objetivo de bloquear socialmente a la víctima al producir un aislamiento social y migración. Esto se logra imponiendo prohibiciones como hablarle, jugar, comunicarse o estar junto a al estudiante afectado.

Manipulación social: Con este se pretende distorsionar la imagen social del niño de forma que el resto de los estudiantes se pongan en su contra. Para lograrlo se usa todo lo que hace o dice en su contra y se le presenta de forma negativa ante las demás personas. Esto termina generando que los demás estudiantes se unan en la agresión contra la víctima o crean que en realidad merece tal abuso.

Intimidación: Se busca inducir miedo en la víctima al consumirla emocionalmente mediante alguna acción intimidatoria como el hostigamiento físico o el acoso a la salida del colegio.

En estos casos es normal que la víctima se sienta culpable y que pueda llegar a pensar que en realidad merece todo el abuso, por lo que es crucial que reciba ayuda y que tenga claro que todo lo que está viviendo es injusto y que en realidad no tiene por qué pasar por eso.